sábado, 28 de agosto de 2010

Lucidez masculina

Probe algunas veces que mi mente volara y funciono, me deje llevar por una corriente de situaciones sin frenarlas y de repente fui la persona más lucida del mundo, aprendí a separar cuestiones que creí inseparables, y ahora un poco aturdida de tanta lucidez me pregunto si puedo afrontarla tan cruda como es, si soy capaz de soportar y mantener esas divisiones, y me digo a mi misma, para convencerme del gran paso, que sino lo doy, de aquello, nunca voy a enterarme. Así que aquí voy, más lucida que nunca empezando, como siempre, una vida donde las cosas se dividen en cajones sin mezclarse, desmenuzando la cuestión para guardarla en lugares separados, "hoy quiero esto y no aquello de vos", es así supongo... Me suena a egoísmo puro... quizás me falte un poco de eso...

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